Si para algo está sirviendo la huelga del 8 M es para hacer que las personas y colectivos se posicionen. Están los de siempre en la negación del feminismo, pero al mismo tiempo tan perdidos como no lo han estado nunca en los tiempos actuales, donde el feminismo (por fin) comienza a ser mainstream, PP y Ciudadanos. Del PP podríamos recordar al no siempre bien ponderado líder del partido y preclaro presidente del gobierno español cuando dijo aquello de que: "Los gobernantes debemos ser muy cautos a la hora de saber cuáles son nuestras competencias y cuales no, y desde luego, no hay ninguna que sea igualar salarios." Pero, a fuer de ser sinceros, me quedo con esta otra declaración de Laura Seco, vicesecretaria sectorial del Partido Popular en Cádiz: “¿Quién va a cuidar a los mayores y menores?”, básicamente porque da en el clavo y hace que no sean necesarias más explicaciones de por qué es necesaria una huelga femenina.
Ciudadanos sería súper entrañable de no ser porque están en condiciones de gobernar o co-gobernar en muchos sitios. Me quedo con este vídeo de Ada Colau en el cual les da un buen repaso.
Pero lo más interesante desde las izquierdas es comprobar cómo el machirulo de izquierdas emerge. Su argumentario base (que además se creen) es decir "¡si soy de izquierdas cómo voy a ser machista!", en tono indignado además. Sin darse cuenta de que el machismo empapa y cala todo y las izquierdas no se libran, particularmente los partidos políticos, que son áreas áridas para las mujeres, campos de testosterona y misóginos por definición. Y claro, desde esa izquierda testosteronizada, no se puede permitir que las mujeres actúen por su cuenta, necesitan de consejos y ayudas claramente paternalistas, y si se rechaza esa ayuda/liderazgo (normalmente de manera educada) se indignan y están a un tris de llamar feminazis a sus supuestas compañeras de lucha. No entienden que es la lucha de las mujeres, en este caso SU batalla, una lucha que nos llevará a un mundo mejor y que los hombres hemos de estar a sus órdenes.
Hay muchos que están teorizando, que están haciendo notar los "graves errores de estrategia", y es que claro, a estas mujeres, cómo se les ocurre, planear algo sin que una gran mente estratégica masculina marque pautas y líneas a seguir... Y claro que habrá errores, cada vez que se hace algo se cometen errores, y estos machirulos que señalan los que a su parecer son mil errores, les bastará que una cosa vaya mal, para intentar hacer punta y saltar con la patriarcal superioridad de "ya os lo decía yo". A esas personas fuera de cualquier organización, son personas tóxico-machistas.
Me encanta el #notAllMen, se nos ha pedido una cosa muy sencilla, que nos pongamos al margen y que ayudemos a liberar a las mujeres de sus cargas familiares para que puedan hacer huelga, que nos organicemos en los barrios para hacer guarderías y nos encarguemos de todo en la casa ese día. Saltan los ofendidos, los que realizan tareas en casa diciendo que es ofensivo que se nos incluya a todos, que hay hombres que ya lo hacen cuando no hay huelga. Pues oye, muy bien, ¿qué quieres? ¿un caramelito porque te has portado bien? Es como pedir que te feliciten cada vez que no te saltas un semáforo. Esas personas no parece que tengan el discurso feminista interiorizado y más bien lo hagan porque "es la moda" o lo que está bien visto en su círculo, pero no porque comprendan la realidad donde los hombres somos violadores, violentos, cobramos más que las mujeres y no nos encargamos de las tareas domésticas ni de cuidados familiares. Y aquí cada cual sabe cómo es y cómo actúa en su círculo más cercano, pero hasta que no nos creamos eso (repito: somos violadores, violentos, cobramos más que las mujeres y no nos encargamos de las tareas domésticas ni de cuidados familiares) no seremos ni aliados ni ayudaremos de verdad al movimiento feminista.
Otro que me gusta mucho es el "sois demasiados radicales, coincido en el fondo pero las formas no, deberíais cambiar". Ante esto un vídeo de 3:42 que desmonta los radicalismos, radicalidad ninguna, demasiado poca. Grande MARTA FLICH.
Así que nada, en resumen, gran trabajo el que se está haciendo para este 8-M. Va a ser una movilización sin precedentes. Hombres a apoyar y a obedecer, bastante tenemos con contestar nuestros entornos más cercanos como para entrar en discusiones con nuestras compañeras, discusiones que buscan la superioridad, y en este caso MANTENER la superioridad.
Ciudadanos sería súper entrañable de no ser porque están en condiciones de gobernar o co-gobernar en muchos sitios. Me quedo con este vídeo de Ada Colau en el cual les da un buen repaso.
Pero lo más interesante desde las izquierdas es comprobar cómo el machirulo de izquierdas emerge. Su argumentario base (que además se creen) es decir "¡si soy de izquierdas cómo voy a ser machista!", en tono indignado además. Sin darse cuenta de que el machismo empapa y cala todo y las izquierdas no se libran, particularmente los partidos políticos, que son áreas áridas para las mujeres, campos de testosterona y misóginos por definición. Y claro, desde esa izquierda testosteronizada, no se puede permitir que las mujeres actúen por su cuenta, necesitan de consejos y ayudas claramente paternalistas, y si se rechaza esa ayuda/liderazgo (normalmente de manera educada) se indignan y están a un tris de llamar feminazis a sus supuestas compañeras de lucha. No entienden que es la lucha de las mujeres, en este caso SU batalla, una lucha que nos llevará a un mundo mejor y que los hombres hemos de estar a sus órdenes.
Hay muchos que están teorizando, que están haciendo notar los "graves errores de estrategia", y es que claro, a estas mujeres, cómo se les ocurre, planear algo sin que una gran mente estratégica masculina marque pautas y líneas a seguir... Y claro que habrá errores, cada vez que se hace algo se cometen errores, y estos machirulos que señalan los que a su parecer son mil errores, les bastará que una cosa vaya mal, para intentar hacer punta y saltar con la patriarcal superioridad de "ya os lo decía yo". A esas personas fuera de cualquier organización, son personas tóxico-machistas.
Me encanta el #notAllMen, se nos ha pedido una cosa muy sencilla, que nos pongamos al margen y que ayudemos a liberar a las mujeres de sus cargas familiares para que puedan hacer huelga, que nos organicemos en los barrios para hacer guarderías y nos encarguemos de todo en la casa ese día. Saltan los ofendidos, los que realizan tareas en casa diciendo que es ofensivo que se nos incluya a todos, que hay hombres que ya lo hacen cuando no hay huelga. Pues oye, muy bien, ¿qué quieres? ¿un caramelito porque te has portado bien? Es como pedir que te feliciten cada vez que no te saltas un semáforo. Esas personas no parece que tengan el discurso feminista interiorizado y más bien lo hagan porque "es la moda" o lo que está bien visto en su círculo, pero no porque comprendan la realidad donde los hombres somos violadores, violentos, cobramos más que las mujeres y no nos encargamos de las tareas domésticas ni de cuidados familiares. Y aquí cada cual sabe cómo es y cómo actúa en su círculo más cercano, pero hasta que no nos creamos eso (repito: somos violadores, violentos, cobramos más que las mujeres y no nos encargamos de las tareas domésticas ni de cuidados familiares) no seremos ni aliados ni ayudaremos de verdad al movimiento feminista.
Otro que me gusta mucho es el "sois demasiados radicales, coincido en el fondo pero las formas no, deberíais cambiar". Ante esto un vídeo de 3:42 que desmonta los radicalismos, radicalidad ninguna, demasiado poca. Grande MARTA FLICH.
Así que nada, en resumen, gran trabajo el que se está haciendo para este 8-M. Va a ser una movilización sin precedentes. Hombres a apoyar y a obedecer, bastante tenemos con contestar nuestros entornos más cercanos como para entrar en discusiones con nuestras compañeras, discusiones que buscan la superioridad, y en este caso MANTENER la superioridad.